miércoles, 20 de enero de 2021

EL EXORCISMO DE ANNELIESE MICHEL

Demonios, posesiones, exorcismos. Son temas que quizás muchas personas no crean y otras no. Usualmente en la antigüedad cuando una persona presentaba conductas agresivas y rechazaba imágenes religiosas, se decía que tenía demonios dentro y siempre se recurría a hacer un exorcismo, para despojar a los demonios de la carne de una persona mortal.

Con el paso de los años y el avance en la ciencia y la medicina, muchas conductas tomadas como posesión demoniaca, fueron adquiriendo sentido y ahora, a la primera que una persona presentaba supuestas características de una posesión, siempre se buscaba la opinión de un profesional para descartar cualquier superstición.
Antiguamente un exorcismo, se hacía a la brava, a la primera, y lamentablemente eso es lo que mucha gente piensa, que un sacerdote puede intervenir a la primera. Sin embargo es todo lo contrario, ya que antes se le deben hacer estudios médicos a la persona con un especialista que pueda avalar bien que todo su comportamiento es debido a una conducta mental de la persona y posteriormente el sacerdote también debe tener evidencia de ello de que las conductas de la persona corresponden a arrebatos de daño mental en esta.
Un sacerdote solo puede intervenir cuando se presente evidencia verdadera de que la persona está poseída, pero, mientras no haya ninguna evidencia que avale la posesión, no se puede hacer nada, absolutamente nada.
Debemos saber que los exorcismos son uno de los temas favoritos de Hollywood. Son cientos las películas que se han producido en torno al tema, sin embargo, pocas se basan en casos reales. Y es que los verdaderos exorcismos son un tema serio para la Iglesia Católica, donde no se toman a la ligera las denuncias de posesión demoníacas, como dije anteriormente, no es algo que se haga a la brava.


Un caso que le trajo varios dolores de cabeza a esta institución fue el de Anneliese Michel, una joven estudiante alemana de 23 años, cuya muerte produjo un serio enfrentamiento entre la fe y la ciencia y fue muy controversial para su tiempo, ya que la chica estaba en realidad poseída, incluso había especialistas que ya daban por sentado que la chica necesitaba ayuda religiosa, sin embargo, todos ellos, los que podían dar testimonio murieron en circunstancias misteriosas. Accidentes, asesinatos y enfermedades extrañas cosa que no se cuenta mucho en el caso.
Esta chica, Anneliese es mundialmente conocida como Emily Rose, ya que su historia fue llevada a la pantalla grande en 2005, donde las licencias artísticas alteraron la versión real de lo que sucedió en su humilde hogar de Alemania.
Esta mujer nació en 1952 en el seno de una familia católica, con una religiosa madre que creía que la única forma de redimirse de sus pecados era a través del dolor. Anne creció tratando de ser la niña buena que su mamá quería, por lo que mientras el resto de las personas de su edad intentaban rebelarse y divertirse, ella llegó a dormir en un piso de piedra desnuda para expiar los pecados de los drogadictos que dormían en la estación de tren local.
Anneliese era una chica sana y tranquila que quería ser maestra para ayudar a transformar el mundo en un lugar mejor. Se educó religiosamente desde que era muy chica, creció en un hogar devotamente católico. Su madre quedó embarazada fuera del matrimonio y tuvo un aborto en 1948 (cuatro años antes de que naciera Anneliese). Se cuenta que por tal pecado no solo asistió a su boda con un velo negro, también llegó a grandes extremos educando a su hija rechazando incluso las reformas de la Iglesia Católica.
Asimismo, su padre también era creyente y consideró en algún momento convertirse en pastor, además tres de sus tías eran monjas. Existe la teoría que atribuye su comportamiento desmesurado a estar endemoniada, y al ambiente familiar; sus seres queridos le habían inculcado que debía pagar por todos los pecados.
¿Curioso? No, viviendo de una familia religiosa, viene a estar poseída ¿porqué sucedió? De acuerdo a muchos estudios sobre posesiones y exorcismos que se hicieron sobre este caso. Se cuenta que las entidades mayormente, toman el cuerpo de personas que son muy devotas religiosamente. Pero bueno, es solo una teoría.
¿Cómo empezaron los síntomas de esta chica?
Se sabe que era una niña sensible y un poco rara cuando le diagnosticaron trastornos físicos y mentales. Luego de esto; la situación solo empeoró. A la edad de 16 años, Anneliese comenzó a deambular mientras estaba en una especie de trance, sin darse cuenta de lo que estaba haciendo. Una vez que tuvo convulsiones, un neurólogo le diagnosticó epilepsia del lóbulo temporal, pérdida de memoria y alucinaciones. Las cosas empiezan a cambiar en 1968 cuando la joven cuenta, el primer aviso fue el comienzo de crisis terribles en las que se sacude sin poder controlarse y adopta posturas difíciles de imaginar.
Sus padres deciden buscar ayuda médica y la trasladan a la Clínica Psiquiátrica Wurzburg. Los médicos concluyen que Anneliese tiene epilepsia, la internan y empiezan un tratamiento de larga duración que no produciría ninguna mejora en el comportamiento de la joven.
Anneliese se sumerge en una profunda depresión y cuando reza empieza a ver sombras, oír voces que le ordenan, y a tener visiones demoníacas. En 1970, tras dos años de sufrimiento en los que los medicamentos no hacen efecto, Anneliese empieza a sospechar que está poseída. Las visiones se intensifican, las convulsiones continúan y la joven se lo comenta a los doctores. Después de la tercera crisis se le suministró un anticonvulsivante que no detiene sus ataques, pero hace que el cerebro pierda sodio produciendo falta de apetito. Pasado más tiempo Anneliese ruega por un tratamiento espiritual y pide un exorcismo. La Iglesia se lo niega ya que no cumple con todos los requisitos y aconseja la búsqueda de ayuda médica.
Anneliese continúa entonces con el tratamiento médico. Los doctores le recetan periciazina un medicamento usado en esquizofrénicos pero que resulta fatal en Anneliese, ya que le incrementa la cantidad de convulsiones.
En 1969, cuando Anneliese tenía 17 años, comenzó a sufrir extrañas convulsiones que los médicos diagnosticaron como epilepsia, sin embargo, las cosas fueron de mal en peor y el comportamiento de Anne se transformó. De ser una chica dulce pasó a insultar e incluso morder a los miembros de su propia familia. A los veinte años, ya no toleraba ver objetos religiosos y había comenzado a oír voces. Comenzó un tratamiento clínico, sin embargo se deprimió y consideró suicidarse. Se dice que escuchaba voces a su alrededor que le decían que se pudriría en el infierno y veía la cara del demonio en todas partes, en todas las personas.
En 1973 las personas de su entorno empiezan a creer que la joven está endemoniada. La chica se rehúsa a acercarse a las imágenes cristianas, no quería beber agua bendita, generando además un aroma a podrido. Sus comportamientos incluían orinar en el piso para luego lamerlo, ladrar debajo de una mesa durante días, comer arañas y morderle la cabeza a un pájaro. El obispo local le dijo que la exorcizaría, que tenía los demonios de Hitler, Nerón y Lucifer.



Como si eso fuera poco, era capaz de gritar durante días sin parar e, incluso, en más de una ocasión fue descubierta bebiendo su propia orina o comiendo insectos. Los padres de la chica estaban tan convencidos que se negaron a continuar con los medicamentos indicados en el hospital y comenzaron a buscar ayuda en la iglesia.
Los primeros hombres de fe que recibieron a la familias apuntaron que era un caso médico, no religioso, pero los Michel ya habían decidido qué le pasaba a Anneliese. Finalmente encontraron en los sacerdotes Ernst Alt y Arnold Renz. Incluso su familia pidió ayuda a la iglesia, pues sospechaban que su hija podría estar poseída por un demonio, sin embargo, su petición de exorcismo fue rechazada y se sugirió que continuara con el tratamiento farmacológico.
El pastor Ernst Alt, después de estudiar el comportamiento de la joven por un tiempo, asegura que hay que exorcizarla y pide el permiso correspondiente al obispo de Wurzburg . La petición es denegada y se le aconseja a la joven seguir un estilo de vida religioso para tener paz de espíritu.
Para que la Iglesia católica proceda a realizar un exorcismo el paciente debe presentar una serie de síntomas de posesión: la persona debe huirle a los objetos religiosos, presentar sansonismo, es decir, tener una fuerza sobrehumana; asimismo, debe demostrar xenoglosia, la cualidad de hablar en lenguas muertas o idiomas que no sabría.
La conducta de Anneliese empeora. La chica se niega a comer la comida que le presentan, en su lugar come arañas, moscas y carbón; duerme en el suelo, bebe su propia orina, grita por horas, destruye los objetos religiosos y se golpea a sí misma. Asimismo, agrede y devela los secretos de todos los miembros de su familia, atacando sus puntos más débiles, además los golpea y los muerde.
Y así, después de tanta insistencia, sus padres volvieron a solicitar la intervención de la iglesia en dos ocasiones más, hasta que en 1975 el obispo de Wurzburg aceptó su petición de realizar un exorcismo en Anne. En septiembre de 1975 el obispo de Wurzburg, Josef Stang, al cobrar conciencia de la gravedad de la situación de Anneliese y los síntomas que presenta, decide asignar al padre Arnold Renz y al pastor Ernst Alt para que procedan con el exorcismo.
Después de la aprobación del obispo, Renz y Alt procedieron a realizar 67 exorcismos durante diez meses (dos sesiones por semana regularmente). Cada sesión supuso un deterioro tanto físico como mental en todos los involucrados ya que duraban aproximadamente cuatro horas. En ocasiones los ataques de Anneliese eran tan violentos que se necesitaba la fuerza de más de tres hombres para poder controlarla.
En este proceso pudieron identificar a seis demonios que habitaban en su cuerpo entre ellos Lucifer, Judas Iscariote, Nero, Cain y Adolf Hitler. Durante sesiones, Anne adquiría una fuerza sobrehumana que requería que fuera sujetada por tres hombres o encadenada a una pared. Además, se negaba a comer e incluso rompió sus rodillas debido a las 600 genuflexiones (gesto de flectar brevemente la rodilla derecha hasta el suelo, con el torso erguido) que realizó obsesivamente durante uno de los exorcismos. Poco a poco su salud se deterioraba más, tenía la nariz y los dientes rotos, numerosas heridas y presentaba síntomas de desnutrición.



Ella fue exorcizada un total de 67 veces. Mientras esto sucedía, ella no comía y se golpeaba a sí misma, empeorando su condición. También se rompió las rodillas porque se arrodillaba demasiado. Hay videos de sus exorcismos en línea.
Decenas de cintas almacenan más de 42 horas de grabaciones de los rituales, los que también fueron presenciados por vecinos y amigos de la familia, quienes señalaron que la joven era capaz de hablar en diferentes lenguas y que incluso tenía distintas voces.
El último exorcismo fue el 30 de junio de 1976. Para entonces, Anneliese estaba en un estado deplorable. No sólo sufría de neumonía, sino que también estaba desnutrida y deshidratada. Su condición era tal que no pudo soportar la intensidad del ritual, y falleció en su casa. Y después de 11 meses y 67 sesiones de exorcismo, el cuerpo de Anneliese no dio más.
Tenía neumonía, se había roto dos ligamentos en la rodilla, pero la autopsia reveló que la causa de muerte fue malnutrición y deshidratación. Cuando murió tenía 23 años y pesaba 30 kilos. Estaba demacrada, tenía muchas partes del cuerpo dañadas y había contraído neumonía.
En noviembre de 1973 Anneliese empieza a ingerir Tegretol; esta medicina, según las normas básicas de la psiquiatría actual, no puede ser recetada a mujeres en edad de concebir ya que perjudica gravemente los glóbulos rojos; además, el Tegretol tiene como efectos secundarios fiebre elevada, carencia de oxígeno en la sangre, disminuyendo la consciencia ante los estímulos externos.
Se tiene registro de que Anneliese tomó esta medicina diariamente, incluso en los días próximos a su muerte. En sus últimos días con vida Anneliese confiesa haber experimentado varias visiones en la que la Virgen le da un mensaje: ella puede liberarse de los demonios o ser la prueba de la existencia de lo diabólico. Anneliese dice a sus allegados que la fecha de liberación sería el 1 de julio.
El 30 de junio de 1976 Anneliese sufre neumonía, no tiene fuerzas para moverse siquiera y pide la absolución a los sacerdotes. Su madre graba su despedida, la joven le dice: “Mamá, estoy muy asustada”. Anneliese Michel fallece el 1 de julio, y pronto la fiscalía empieza a investigar el hecho.
A los dos exorcistas y los padres de Anneliese se les acusa de homicidio por negligencia. El juicio que comenzó el 30 de marzo de 1984 se convirtió en un gran espectáculo en los medios comunicación.
Según la autopsia la chica murió por desnutrición; los especialistas médicos declaraban que si la hubieran alimentado a la fuerza unos días antes de su muerte su vida hubiera podido salvarse.
Dos años después de su muerte los padres piden la exhumación para comprobar si el cuerpo de su hija se conservaba de manera anormal, según las autoridades el cuerpo presentaba los signos de descomposición naturales.
Para defenderse los exorcistas trataron de asegurar la presencia de demonios exponiendo las cintas que pudieron captar de todos los hechos. En ellas se pueden escuchar las voces guturales provenientes de la joven. Las grabaciones también muestran dos voces diferentes pero simultáneas y el dominio de idiomas que la chica supuestamente desconocía.

Sin embargo, los psiquiatras aludían a la teoría de inducción doctrinaria; de acuerdo a esta teoría los sacerdotes proporcionaron a la joven la información que utilizaría para su conducta psicótica, la cual afirmaría que su comportamiento era consecuencia de una posesión demoníaca.
Los dos exorcistas son declarados culpables con una sentencia de seis meses de prisión con libertad condicional. A los padres también los encontraron culpables pero no se les pidió que cumplieran condena; se consideraba que habían sufrido mucho según el criterio de la ley alemana.
A raíz de este caso los sacerdotes hicieron un esfuerzo por modernizar el método de exorcismo, ya que databa de 1614. Una comisión de teólogos y sacerdotes formó una comisión para analizar estas prácticas y pidieron una reforma al Vaticano en el año 1984.
El Vaticano aplicó algunas reformas en 1999, las primeras en tres siglos, entre las que destaca la norma de que los exorcistas debían poseer conocimientos médicos; sin embargo, la mayoría de las recomendaciones de los obispos alemanes se ignoraron.
La historia de Anneliese se utilizó para producir las películas El exorcismo de Emily Rose (2005), en la cual se destaca especialmente el juicio, y Réquiem (El exorcismo de Micaela (2006). Como dato curioso, durante la escena del exorcismo en la cinta de ''El Exorcismo de Emily Rose'' se pusieron fragmentos de la cinta original de Anneliese Michel.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

EL ENCIERRO DE SYLVIA LIKENS

El morbo se conjuga con una reacción de hipersensibilidad en el cuerpo. Frente a la pantalla no hay quién no se horrorice por lo visto. En u...