sábado, 20 de febrero de 2021

LAS REGLAS DE LA OUIJA

Hablar con los seres del más allá y explorar lo desconocido siempre ha sido una de las más grandes tentaciones del ser humano, misma en la que apuestan todo, hasta su alma de ser necesario, con tal de saciar la curiosidad. Es por eso que para poder lograr dicho objetivo, el ser humano ha creado distintos aparatos, métodos y hasta rituales que permiten abrir un portal hacia el otro mundo y romper la brecha entre vivos y muertos, sin importar que en el camino se topen con entidades oscuras.


Uno de estos instrumentos creados, es la ouija ¿pero qué es la ouija? Este es un juego de mesa que tiene grabado el abecedario en su tablero, los números pueden ir del 0 al 9, también cuenta con las palabras “SI”, “NO” y “ADIÓS” y algunos extras, dependiendo del diseño. También contiene un apuntador que tiene como finalidad, señalar la letra o número dado por el espíritu.

El propósito con el que fue creado este tablero fue para comunicarse con los muertos y aunque hay personas que se toman enserio este asunto, hay otras que se lo toman a mal y juegan con entidades que desconocen. Es por eso que este es considerado uno de los juegos más peligrosos del mundo, pues aunque es apto para niños mayores de 8 años, puede traer consecuencias aterradoras.
Si a pesar de los posibles peligros aún quieres comunicarte con los espíritus, enseguida te voy a contar unos aspectos que debes conocer si quieres jugar con este tablero.

Para jugar la Ouija es necesario poner 2 dedos ligeramente sobre el apuntador y por seguridad con al menos otra persona. El peso de los dedos debe estar repartido equitativamente, lo ideal es no apoyar los codos en la mesa al principio, pues el espíritu aún no tiene tanta fuerza.

También es recomendable no cruzar las piernas para no cortar la energía.

Preguntar si hay espíritu presente: Hay personas que hacen ritos de entrada pero no es necesario hacerlo, es a tu elección. Sé paciente, a veces los espíritus tardan en llegar, si vez que se tarda mucho puedes dejar el tablero unos minutos y regresar, a veces cambiar a un ambiente más tranquilo favorece para la llegada de un ente y también ayuda para que en la sesión exista una comunicación más efectiva.

Siempre debes estar concentrado, los ambientes inestables no le gustan a los espíritus.

Una vez que el espíritu llega, probablemente tenga algo que decir, pregunta si tiene algún mensaje y siempre muestra respeto. Ya que conozcas un poco sobre este, puedes hacer preguntas sobre ti o las personas que te estén acompañando o sobre algún asunto del futuro.

Tú y tus acompañantes siempre deben hablar despacio y claro y hacer una sola pregunta a la vez, no hay que confundir al difunto. No asumas que porque es un espíritu debe saber todo respecto al pasado, presente y futuro. Puede que algunos sepan mucho, como otros no tanto.

Debes creer que hay un espíritu ahí, porque realmente lo hay, pero no significa que debes de creer todo lo que dice, pues algunos pueden llegar a decir mentiras, en el caso de los demonios. Aun así, diga lo que diga el espíritu, no te dejes sugestionar.

Cuando guardes la ouija, no pongas el apuntador sobre el tablero.
Ahora que sabes cómo jugar la Ouija, es probable que te preguntes como conseguir una, y aunque siempre existe la posibilidad de comprarla, hay otra manera sencilla y económica de obtener una tabla espiritista, pues puedes fabricarla tú mismo desde la comodidad de tu casa.

¿Cómo hacerla?

Puede ser de cualquier material, como madera, cartón, o cualquier objeto donde se pueda escribir, todo se vale.

En el tablero escribirás todas las letras en una o dos filas, asegurándote de que los caracteres sean lo suficientemente grandes para leer. En la fila de abajo se escriben los números del 0 al 9. Tendrás que añadir también los símbolos “Sí”, “No” y “Adiós”, lo que te facilitará la comunicación con los espíritus. Puedes añadir cualquier otra frase que desees.

Necesitarás un apuntador para jugar la Ouija. Puedes usar un anillo, una moneda o un vaso pequeño boca abajo.

Cumpliendo estos pasos, ahora conoces como hacer una. Pero aquí no acaba el asunto, también hay unas reglas que debes conocer y tomar en cuenta antes de jugarla, acá te las cuento.

Nunca preguntar cuando te vas a morir: Hay 3 posibles razones de porque no deberías preguntar sobre tu muerte al jugar la Ouija. La primera es que muchos espíritus y demonios son mentirosos, ellos podrían inventar una fecha y el peligro en esta situación, es que te puedes sugestionar y causar inconscientemente tu muerte.

La segunda es que si te toco hablar con un demonio o un espíritu malo y no tiene el poder suficiente de leer el futuro, él podría darte una fecha y acertar, pues el mismo podría provocar tu muerte el día “adivinado”. 

La tercera es que incluso si te dijeran la verdad, puede que la respuesta no te vaya a gustar. A veces es mejor no buscar algunas respuestas, porque las puedes encontrar.

Nunca preguntarle al difunto como murió y cuando murió: Se considera una falta de respeto hacia el espíritu presente, así que nunca se te ocurra preguntar este tipo de cosas.

Nunca la juegues en un cementerio: Al jugarla en un cementerio, puede haber cientos de almas interesadas en comunicarse con los jugadores, tal vez la mayoría serán fantasmas inofensivos pero también habrá espíritus agresivos. Un lugar lleno de tumbas, en medio de la nada en la oscuridad de la noche, quizás no sea el mejor escenario para hablar con algún ente malo.

No todos son buenos: Algunos podrían pensar que lo más probable, es que venga un espíritu bueno a la ouija, y es verdad, pero aunque te toque charlar con alguna entidad genuina, no te exenta de que más tarde llegue alguna con siniestras intenciones.

Y es que cabe decir que en el mundo de los espíritus hay categorías, los malos tienen más poder y experiencia, ya que probablemente han estado atrapados por muchos años en el limbo o incluso en el mismo infierno, por lo que pueden quitar fácilmente a los espíritus buenos de la ouija a su antojo.

Nunca te vayas sin despedirte y sin que el espíritu se despida: 

Muchas veces nos cansamos de jugarla o nos dio miedo algo que dijo o hizo el espíritu, y por instinto dejamos de jugar sin despedirnos, pero es un error que puede convertirse en uno muy grave, ya que dejas la posibilidad de que el espíritu se quede en la tabla o peor aún, que sea liberado, ya que al no haber una despedida, el portal que se abrió no se cierra y es cuando los espíritus llevan la delantera.

Realmente esto no tiene mucha ciencia, simplemente cuando no se quiera jugar, háganle saber al espíritu que ya se tienen que ir, agradézcanle por su tiempo si es que trataron con alguien amable. 

Si el espíritu menciona que no se quiere ir y no dirige el apuntador hasta donde dice “Adiós”, ustedes deben insistir firmemente, si no funciona y ven que el apuntador está dando vueltas y vueltas como haciendo berrinche, le van a tener que decir cosas hirientes y maldiciones al ente, pero principalmente tendrán que hacerle saber que Dios esta con ustedes, cuyo poder es infinitamente más grande que el del espíritu.

Ya sea que el espíritu se vaya de una manera pacífica o un poco más complicada, el espíritu siempre se va, él no tiene el poder de quedarse si no se lo permiten.

Nunca hay que jugar la Ouija solo: No todos los espíritus son malos pero puede tocar la mala suerte que llegue uno de ellos, aun así aunque ellos tengan deseos por poseerte no lo pueden hacer de buenas primeras, no es fácil ser poseído pero si es posible.

En palabras coloquiales, primero debe haber una real conexión entre la persona y el espíritu, el espíritu se hace amigo del participante, le hace favores y es muy amigable por un tiempo, hasta que la persona confía plenamente en él, después de que ya se le dio poder, toda esa amabilidad se convierte en hostilidad.

Ahora el espíritu tiene la fuerza suficiente para ser autónomo, es decir, ya no necesita que la persona juegue. Es cuando empieza a aterrorizar al jugador, ya sea mediante apariciones, destrozos, daños físicos a la persona y/o cualquier otro tipo de manifestación. 

Su intención es dañar la fe de la persona y llenarla de energía negativa para concluir su objetivo inicial, la posesión.

Ahora ya sabemos cómo ocurre una posesión demoníaca, ¿pero qué tiene que ver con jugar la ouija solo o no?

El espíritu maligno no está interesado en grupos donde hay más de una persona ya que no puede lograr una conexión real con alguno de los participantes. Ellos tienden a buscar personas que estén jugando individualmente para poder tener un real acercamiento con alguien, por eso mismo es la recomendación de jugar acompañado, además de que es más divertido, nada como el miedo compartido.

Si dice ser un familiar o conocido tuyo, realiza un cuestionario: Muchas veces llegan a la tabla espíritus de personas que conociste y ya no están con nosotros, pueden venir por diferentes razones: para dar avisos, porque no están descansando en paz o simplemente porque nos extrañan.

En ocasiones puede ser real que ellos lleguen, pero en otras no, por eso es importante realizarles un cuestionario con preguntas que solo esa persona sabría, si acierta la mayoría de las preguntas probablemente sea la persona que conoces, no olvides que también hay que tomar en cuenta la forma en que se comunica, si vez que dice palabras, expresiones o cualquier cosa el difunto no hubiera dicho en vida, probablemente sea un impostor.

Es importante tomar en cuenta todos los detalles, porque a veces los espíritus impostores pueden ser asertivos e inteligentes a la hora de fingir ser alguien más. Te corresponderá a ti determinar si realmente es o no es el espíritu que dice ser.

Llevar protección: Probablemente nunca lo vayas a necesitar, ya que jugar la ouija de manera responsable, resulta ser una experiencia divertida y diferente, pero existe la posibilidad que el juego se ponga un poco feo. Es por eso que recomiendo tener objetos de protección, como los siguientes:

Crucifijo: Atormenta a cualquier espíritu maligno o demonio, les recuerda la derrota en el Calvario y el triunfo de Dios, les recuerda que Él será su Juez en el Juicio Final.

Agua bendita: El demonio incluso puede entrar perfectamente en una iglesia, sus muros no le contienen, el suelo sagrado no le refrena. Sin embargo el agua bendita sí que lo aleja.

Biblia: La palabra de Dios condena a Satanás y todas sus obras.

Rosario: Cuando es nombrada la Virgen María, los exorcistas perciben cómo los demonios se enfurecen enormemente al tener que enfrentarse a la Madre de Dios.

Cruz de San Benito: La Medalla de San Benito es un sacramental reconocido por la Iglesia con un gran poder de exorcismo.
 Recuerda que no es necesario que tengas todos estos objetos, es suficiente con uno o algunos de los mencionados, tampoco es necesario que los tengas en el mismo cuarto de la sesión o tan cerca de la ouija, ya que pueden intimidar a cualquier espíritu antes de que venga a jugar.

También recuerda que la ouija no es la única manera de que un espíritu malvado o un demonio pueden llegar a tu vida, independientemente juegues ouija o no, siempre es bueno tener un arsenal contra el diablo.

Nunca retes a un espíritu, te podría sorprender: En muchas ocasiones durante las sesiones de la Ouija, no falta el valiente que no cree en la tabla espiritista, el escéptico que normalmente quiere poner a prueba al visitante del más allá, y no es que el espíritu se ofenda si alguien quiere alguna demostración de su poder, pero como para todo hay modos de pedir las cosas.

Pedirle a un espíritu una señal o cualquier manifestación para poner un poco de emoción a la noche de una forma amable está bien (aunque pedir señales no es lo más recomendable), pero si se le impone como un reto, de una manera incrédula o déspota, probablemente no les va gustar su respuesta, y no me refiero precisamente a la respuesta que escriba en el tablero.

Después de leer esta historia ¿Te atreverías a jugar la ouija?

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